Historias reales sobre la PCI

Ocho familias comparten sus experiencias sobre parálisis cerebral infantil (PCI) y comentan las diferentes estrategias nutricionales que funcionaron en sus hijos. Escucha sus historias en primera persona.

Antonio y Dolores

Antonio y Dolores son los padres de Antonio y Jesús, ambos con parálisis cerebral. Hace dos años su doctora le pautó un suplemento nutricional a uno de ellos ya que no cogía peso y eso empezaba a ser un riesgo para su salud. Desde entonces, su hijo está mucho mejor, coge menos infecciones y tiene más energía para su vida diaria.

Mirella y Francisco

Mirella y Francisco José nos hablan de cómo los suplementos nutricionales ayudaron a Coraline a recuperar el peso que perdió después de una cirugía. Al mejorar su estado nutricional mejoró también su ánimo y su nivel de energía, estando mejor preparada para hacer las sesiones de fisioterapia. En definitiva Coraline estaba mejor, y sus padres ¡Felices por ello!

Lola, la madre de Jorge, nos cuenta cómo los espesantes han contribuido a mejorar la alimentación de Jorge. Gracias a ellos, Jorge puede tomar líquidos de forma segura, asegurando así una correcta hidratación.

La familia de Nora nos cuenta cómo la alimentación por vía PEG cambió su vida. Enseguida tuvieron claro que era la mejor decisión que podían tomar y desde entonces han integrado la alimentación por sonda a sus vidas con total normalidad.

A pesar de sus dificultades de alimentación, Ronnie ha recorrido un largo camino. Su madre, Rikki, y su abuela, Vicky, percibieron la diferencia después de empezar a administrarle suplementos nutricionales orales (SNO) según la recomendación de un profesional sanitario. Los SNO ayudaron a Ronnie a alcanzar sus necesidades nutricionales, lo que redujo la preocupación de su madre y su abuela, y aumentó su seguridad a medida que veían que crecía más fuerte.

Colleen, Paul y su hija, Tierney, se dieron cuenta de que pequeños detalles podían marcar una gran diferencia. Al añadir espesantes a las bebidas, las opciones de Tierney se ampliaron, ya que podía elegir lo que quería beber, ¡en cualquier lugar y en cualquier momento!

La madre de Nathan, Suzanne, comparte con nosotros la historia de cómo Nathan comenzó a alimentarse por sonda nasogástrica. La confianza de Suzanne y el deseo de alimentar a su hijo la ayudó a superar sus miedos iniciales, algo que supuso un beneficio para la salud de Nathan.

La eterna optimista Miriam comparte la historia de su fuerte hijo de 6 años, Yehoshua, y su extraordinario padre, Jeremy. Miriam y Jeremy comparten cómo tomaron una de las decisiones más difíciles de su vida: iniciar la alimentación enteral por sonda de gastrostomía. ¡Su experiencia en la búsqueda de la felicidad y la aceptación es una historia de empoderamiento!