Logística en casa

Pequeños trucos para la logística en casa.

¿Cómo preparar la casa para el nuevo miembro de la familia? Seguro que te planteas muchas preguntas.

Es importante dar respuesta lo antes posible a las necesidades, tanto transitorias como permanentes, de los niños con parálisis cerebral infantil. Ante esta situación el objetivo principal es que la casa sea un entorno donde estar seguro y a gusto.

Muchas veces se está más pendiente de la recuperación física que del ambiente que le rodea, sin embargo la vivienda es fundamental para que el niño con parálisis cerebral pueda ir adquiriendo la autonomía y la independencia necesarias a medida que va creciendo y mejorar así su bienestar y calidad de vida.

Pequeños trucos para la logística en casa

  • Retirar los muebles de la entrada y de otras dependencias de la casa para que el acceso sea más fácil y poder obtener espacio para maniobrar con la silla de ruedas, o para moverse con más seguridad para evitar posibles caídas o golpes.
  • Procurar que los espacios sean abiertos, con el suelo despejado, para facilitar el momento en que empiece a gatear, rodar sobre sí mismo, o caminar.
  • Las alfombras pueden ser un elemento peligroso, por eso a veces hay que eliminarlas o fijarlas al suelo con una red antideslizante de goma, o con cinta adhesiva de doble cara, para evitar que se mueva y provoque un resbalón o un tropiezo.
  • Proteger las esquinas de los muebles.
  • Modificar o cambiar el mobiliario, o su disposición para poder desarrollar diferentes actividades, juegos, etc.
  • Despejar el paso, sin alfombras, cables o juguetes, para facilitar todos sus movimientos y desplazamientos.
  • Las camas-nido o los tatami a nivel del suelo cuando son mayores, facilitan el acceso por sí mismo y reducen el riesgo de caídas.
  • Decorar la habitación de forma alegre, con papel o vinilos en la pared, y llenarla de objetos, libros y juguetes con muchos colores y sonidos.

En lo que se refiere a la adaptación del entorno:

  • Incluir medidas de domótica cuando sea posible para poder controlar la casa sin tener que pedir ayuda: subir persianas, abrir puertas, encender luces o la tv, etc.
  • En casos de movilidad muy difícil y gran corpulencia, puede valorarse una grúa de techo para ayudar a los desplazamientos, pero siempre promocionando que la persona haga el máximo por sí mismo.
  • Se recomienda invertir en elementos que faciliten la comunicación. Poder expresar qué se quiere y cómo se quiere de forma adecuada y rápida, es la mayor sensación de libertad y autonomía que se puede tener. Los dispositivos de comunicación son portátiles y los acompañarán todo el día para facilitarles el acceso en cualquier entorno.
Se trata de superar cada etapa, e ir paso a paso proporcionándole en cada momento las ayudas que realmente necesita.